«Un Scout es amigo de cualquiera y hermano de cualquier otro Scout» y así, en familia, nos fuimos de excursión a Manjirón los escultas y los rovers. Extraño, pero esta vez alquilamos un bus conjunto ambas unidades y ya sacando las guitarras empezamos la excursión.
El albergue era bastante grande, con un buen comedor, una buena sala con una cálida chimenea y también unas acogedoras, pero heladas cabañas.
Íbamos haciendo juegos y actividades que habíamos preparado (y no, no somos muy mayores). Continuaba la excursión y llegó la primera noche en la que con nuestra bebida y nuestras patatas, realizamos en confianza nuestro «amigo invisible» y alguno salió de la sala con nueva ropa interior o incluso una sartén.
Al principio del segundo día salimos de marcha dirección sur hacia el embalse del Atazar con la confianza de tener una ruta tranquila y agradable, pero a los cinco kilómetros llegaron las dificultades, yendo por caminos no tan transitados cerca del río hasta llegar a la presa. Además nuestro guía decidió hacer dos kilómetros más de lo predicho. Finalmente llegamos para comer. Hicimos más juegos por todo el pueblo, un precioso cineforum sobre la película de «Intocable». En el segundo amanecer, recogimos y todos calentitos estuvimos » en familia» o entre Scouts tocando cálidamente la guitarra.
Ya de vuelta en Madrid todos nos fuimos a nuestras cómodas casa esperando al año nuevo y a una nueva excursión.