El método scout se define como un sistema de autoeducación progresiva, basado en los valores, aprender haciendo con ayuda de adultos, mediante vida en peños grupos, con una formación autogestionada asumiendo de forma progresiva responsabilidades, a través del contacto directo con la naturaleza. Scouts de España lo define como “un método basado en la interacción de elementos igualmente importantes que trabajan juntos como un sistema cohesivo, y la implementación de estos elementos de una manera combinada y equilibrada es lo que hace que el Escultismo sea único.” (Programa Educativo Scouts de España -ASDE, 2018, p. 68).

Los elementos sobre los cuales se sustenta esta metodología son los siguientes (Oficina Scout Mundial, 1998, p.22; Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018):

  • La educación en valores, por medio de una promesa y una ley que se aceptan de manera voluntaria
  • La educación por la acción, a través del a propia experiencia del aprender haciendo, el aprender jugando y el aprendizaje por medio del servicio y participación en la comunidad.
  • La vida en pequeños grupos
  • La asistencia de adultos que aconsejan y acompañan, apoyando en la progresión personal.
  • Programas progresivos, atrayentes y estimulantes compuestos por un marco simbólico y un sistema progresivo de objetivos y actividades educativas variadas.
  • Vida en la naturaleza

La Promesa Scout:

La promesa Scout representa un compromiso personal, adquirido de manera libre, voluntaria y consciente, en el cual se acepta cumplir la Ley Scout asumiendo la responsabilidad de realizar el esfuerzo personal por cumplir un compromiso individual, social, espiritual y ético. Siguientes. Esta promesa se realiza en grupo frente a iguales, donde se hace público el compromiso personal y social, tanto con el grupo como con la comunidad, mencionados anteriormente, y está compuesta por cuatro partes, que integra lo anteriormente mencionado. (Oficina Scout Mundial, 1998)

La fórmula de la promesa scout, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 84) es la siguiente:

“Prometo por mi honor y con la ayuda de (Dios, fe, creencia, conciencia) yo prometo, hacer cuanto de mi dependa por:

– Cumplir mis deberes con Dios y mi patria/ con los demás / con mi Fe y mi Comunidad,

– Ayudar al prójimo en toda circunstancia

– Cumplir fielmente la Ley Scout”

En muchos grupos scouts se emplea la pañoleta como símbolo de haber realizado la promesa, aunque en otros grupos la pañoleta se lleva desde la entrada al mismo como símbolo de pertenencia.

La Ley Scout:

La Ley Scout representa un código de vida basado en los principios del movimiento scouts, que deben servir de guía durante la vida, tanto individualmente como colectivamente, al ser la base del funcionamiento de las distintas secciones scouts, ofreciendo artículos concretos y prácticos que ayuden a los jóvenes a comprenderlos y poder aplicarlos como base de su vida. Esta Ley debe ser aceptada de manera libre y voluntaria a través de la realización de la Promesa Scout mencionada anteriormente y representa el núcleo del método scout (Bertolini, 1964).

La ley scout está dividida en diez artículos, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p.84):

  1. El Scout cifra su honor en ser digno de confianza.

  2. El Scout es leal.

  3. El Scout es útil y servicial.

  4. El Scout es amigo de todos y hermano de cualquier otro Scout.

  5. El Scout es cortés y educado.

  6. El Scout ama y protege la Naturaleza/ El Scout ve en la Naturaleza la obra de Dios y la protege.

  7. El Scout es responsable y no hace nada a medias.

  8. El Scout es animoso ante peligros y dificultades.

  9. El Scout es trabajador, austero y respeta el bien ajeno.

  10. El Scout es limpio y sano; puro en sus pensamientos, palabras y acciones.”

Esta ley puede variar según la asociación scout, siendo similar en todas ellas partiendo de la constitución de la Organización Mundial del Movimiento Scout (Organización Mundial del Movimiento Scout, 2017, p.2; Baden-Powell, 2008, p.20 ;Movimiento Scout Católico, 2010, p.10)

Educación por la acción:

El método scout se basa en la educación por la acción y mediante la propia experiencia, para facilitar el aprendiza y desarrollo por medio de experiencias prácticas en la vida real. A través de dicha experiencia se busca crear un aprendizaje relevante y significativo, a la vez que atractivo y divertido para el joven. (Organización Mundial del Movimiento Scout, 1998;  Movimiento Scout Católico, 2010).

Existen dos elementos básicos en esta educación: la técnica de proyectos y el juego, ambas presentes en todas las secciones adaptadas a la edad de los miembros.

La técnica de proyectos consiste en la realización de un proyecto propuesto por los jóvenes, donde participan en el ciclo completo de su preparación y ejecución. Esta técnica es similar al empleado en los proyectos de aprendizaje realizados en los centros educativos. Programa Educativo Scouts de España -ASDE (2018, p. 72).

Así, todos los proyectos, como recoge el Programa Educativo Scouts de España -ASDE (2018, p. 85), desarrollado anteriormente en los manuales del educador de castores (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p.62-64), manual del lobato (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p. 54-61)  y manual del educador de scout (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p. 37), deben realizarse en las siguientes fases:

  1. Idear: Buscar las necesidades, inquietudes, intereses, ideas o deseos que se desean realizar con los compañeros de la sección, así como el medio sobre como materializarla, ya sea mediante viajes, actividades sociales, construcciones, dinaminas, juegos o manualidades. Para ello se pueden usar métodos de estimulación de la creatividad y la imaginación, como cuentos, cortos, danzas, visitas previas a exposiciones, etc.
  2. Elección del proyecto: Una vez expuesto las ideas y actividades propuestas, se elige por votación aquella que resulte más interesante para la mayoría del grupo. En este apartado se anima a que se defiendan cada una de las propuestas antes de realizar la votación. Durante este proceso puede proponerse también la posibilidad de englobar varias de las propuestas como una sola actividad. Se debe tener en cuenta además factores como los objetivos y contenidos programados en el Plan Anual de Sección, disponibilidad de recursos materiales o humanos para realizarlo, complejidad acorde a la edad de la sección, viabilidad en la temporalización y si cumplen con los fines del escultismo.
  3. Planificar y programar el proyecto: Seleccionado el proyecto, este deberá ser planificado para organizar las actividades que son requeridas para llevarlo a la práctica.
    En primer lugar se deberán definir los objetivos que se pretenden alcanzar, concretando los expuestos durante las anteriores fases y seleccionando a continuación los contenidos educativos para lograr dichos objetivos. En función de la sección, este proceso recaerá sobre los propios monitores, en caso de unidades pequeñas, adaptando las propuestas de los niños, a ser tarea de los propios educandos, en el caso de las secciones mayores, siendo los monitores guías en su proceso de elaboración. Tras realizar dicho paso, se procederá a la programación de actividades o talleres necesarios para la elaboración del proyecto, programándolos en función de las necesidades. Así mismo, se planificará los recursos materiales necesarios y su forma de obtención. La duración de la programación dependerá de la complejidad del proyecto, aumentando progresivamente en función de la edad de la sección.
  4. Realización del proyecto: Considerado el momento cumbre, tras su planificación y programación, se ejecuta el proyecto. Dependiendo de la sección el grado de participación de los monitores durante su realización será mayor o menor, pero siendo siempre el educando el protagonista de la actividad. En todas las secciones, pero especialmente en las secciones pequeñas, los monitores deberán velar siempre por el éxito del proyecto, realizando todas las aportaciones y modificaciones necesarias, siendo los animadores de los educandos durante la actividad y haciendo que se sientan plenos protagonistas de ella.
  5. Evaluación del proyecto: Tras la realización del proyecto se debe proceder a su evaluación, con el fin de analizar lo programado y lo realizado, reflexionando sobre aquellos cambios realizados, elementos añadidos o eliminados de la programación y buscar posibles mejoras futuras. La evaluación deberá ser tanto colectiva como sección como individual, como método de evaluación del proceso personal durante el proyecto. Se recomienda en este punto positivizar aquellos resultados negativos para presentarlos a los educandos como oportunidades de mejora en futuros proyectos, previa evaluación por parte de los monitores de este.
  6. Celebración: La última etapa del proyecto tiene como finalidad celebrar el trabajo realizado, con un enfoque optimista en el que resaltan los resultados positivos logrados. La celebración suele consistir en una fiesta realizada como una actividad más al finalizar el proyecto.

El juego es otro de los elementos básicos de la educación por la acción al ser una ocasión para conseguir aprendizajes significativos, los cuales pueden ser programados con objetivos concretos, permitiendo aprender nuevas reglas, a asumir errores y derrotas, competir de forma responsable, cooperar entre iguales y personas de distintas edades, conocer sus propias capacidades y limitaciones, emplear la imaginación y asumir roles dentro del grupo scout (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018, p. 73).

Vida en pequeños grupos:

El método scout basa su aprendizaje en el trabajo en pequeños grupos, denominado originalmente “sistema de patrulla” (Baden-Powell, 2008), el cual es adaptado al resto de secciones. Este sistema de aprendizaje colaborativo en pequeños grupos, compuesto por jóvenes de edades similares, tiene como objetivo el desarrollo de sus habilidades, mediante la responsabilidad y la pertenencia a un grupo de iguales, con intereses comunes que permita su sociabilización y sentido de pertenencia, así como la creación de relaciones constructivas y vínculos personales, todo ello gracias a la organización de su vida grupal de forma democrática. El sistema de patrulla no toma su organización de manera jerárquica, si no de forma democrática, como se ha mencionado anteriormente, donde los monitores son parte de la sección, que la componen varios grupos, pero no parte de ninguno de ellos, siendo estos los responsables de ayudar a los jóvenes a desarrollar sus capacidades de cooperación y diálogo dentro de su grupo, así como con el resto de compañeros de la sección, además de guiarles en los objetivos educativos propuestos en cada sección.  La organización, tamaño e independencia de estos grupos según la edad, siendo la unidad Scout o Tropa donde se emplean en mayor medida. En la unidad más pequeña, castores, dichos grupos fijos no existen debido al funcionamiento y organización de la unidad, existiendo solo de forma esporádica y variando en cada actividad. En las secciones más mayores estos grupos también pueden ir variando en función de las actividades, según las necesidades organizativas de la sección y el número de miembros que la compongan (Organización Mundial del Movimiento Scout, 1998).

Vida en la naturaleza:

El entorno natural, refiriéndose como se indica en El Sistema Educativo del Movimiento Scout “ambiente natural – los bosques, las llanuras, el mar, las montañas, el desierto – en contraposición con los ambientes artificialmente creados, como el patio escolar, los campings de cemento y las ciudades atestadas” (Organización Mundial del Movimiento Scout 1998, p. 48) ofrece un entorno ideal para crear oportunidades de aprendizaje en los jóvenes y el entorno ideal para poner en práctica el Método Scout mediante diversas actividades.  Estas actividades pueden contribuir al desarrollo personal de distintas áreas, como el desarrollo físico, al proveer de amplios espacios naturales para realizar actividades, marchas o acampadas; el intelectual, desarrollando los sentidos o habilidades de observación y orientación; el emocional, proporcionando entornos donde poder explorar emociones y sentimientos distintos a los urbanos; social, al desarrollar la interdependencia con los compañeros durante la convivencia en la naturaleza así como al crear situaciones de experiencias compartidas; y espiritual, ofreciendo oportunidades para la reflexión y meditación personal. Todo esto ayuda al joven a sentir lo real y esencial de la vida, alejándolo de dependencias como la tecnológica.

También puede desarrollarse en entornos naturales más pequeños dentro del ambiente urbano, como en espacios verdes amplios, que permitan realizar actividades al aire libre dentro del entorno en el cual vive el joven (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018).

Por último, las actividades de protección del medio ambiente son parte común de los programas Scout de todas las secciones, pudiéndose aplicar también en medios urbanos, las cuales se ven reforzadas por el contacto y proximidad con la naturaleza del joven (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018).

Programas progresivos:

Los programas progresivos ofrecen objetivos y actividades basados en los intereses de los jóvenes, en función de su progresión personal y su edad (Bertolini, 1964).

Estos programas permiten que los objetivos sean alcanzados y evaluados por los jóvenes siguiendo su propio ritmo de desarrollo, de manera ordenada aumentando su complejidad según se superan los distintos indicadores de evaluación. Estos programas son concretados por los grupos a nivel de grupo y sección por medio del Proyecto Educativo de Grupo, y desarrollados anualmente mediante el Plan Anual de Grupo, que establece los objetivos, tareas y recursos para lograrlos (Organización Mundial del Movimiento Scout, 1998; Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018).

Partiendo del sistema de programas progresivos, la progresión personal toma como referencia los objetivos y contenidos de cada sección. Estos objetivos están parten de las áreas propuestas por la Organización Mundial del Movimiento Scout, las cuales son corporalidad, creatividad, carácter, afectividad, sociabilidad y espiritualidad; y son adaptadas por las diferentes organizaciones scouts nacionales. En España son adaptadas principalmente de dos formas: como áreas de desarrollo personal, según la organización de MSC, las cuales son física, emocional, intelectual, social, personal y espiritual (Movimiento Scout Católico, 2009); o en compromisos, como se organiza actualmente en ASDE, los cuales son compromiso social, compromiso ambiental, compromiso para la salud y compromiso espiritual. Estos compromisos se desglosan a su vez en diferentes bloques con su propio contenido y criterio de evaluación (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018).

Según la progresión personal en las anteriores áreas o compromisos, y siguiendo los indicadores de evaluación que desarrolla cada organización scout, el Método Scout propone para todas ellas tres etapas de progresión, las cuales se emplean en todas las secciones, adaptando su nombre a su marco simbólico. Dichas etapas, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p.86), son:

Integración: Supone la primera etapa dentro de cada sesión, donde se realiza la toma de contacto de ella, incluyendo su metodología, tradiciones, organización, simbología y personas que la componen.

Participación: La segunda etapa de progresión significa la mayor participación e implicación dentro de la sección y también a nivel personal, conociendo ya los elementos propia de la sección comentados en la anterior etapa y poniendo en práctica los aprendizajes y conocimientos adquiridos.

Animación: La última etapa de la progresión se centra en la capacidad personal para tomar la iniciativa y dinamizar el grupo, con una actitud de servicio a la sección donde se ayuda a otros miembros en la adquisición de los conocimientos necesarios para la vida en la sección.

Estas progresiones se representan a través de ceremonias o insignias para dar mayor importancia al desarrollo personal mediante los marcos simbólicos de cada sección.

Marcos simbólicos:

El marco simbólico en el Movimiento Scout se define como “un conjunto de símbolos que representan nuestra propuesta educativa para un rango de edad particular” (Programa Educativo Scouts de España -ASDE, 2018, p. 75). Este conjunto de símbolos tiene como finalidad ayudar a crear un sentido de identidad con los valores del Movimiento Scout ofreciendo a los jóvenes una forma de estimular y enriquecer los distintos programas educativos. Cada una de las secciones tiene su propio marco simbólico, el cual cambia en función de la edad y madurez del joven, adaptándose a sus distintas necesidades y capacidades imaginativas, con el objetivo de desarrollar las distintas áreas de progresión personal y programa educativo de la sección, incluyendo elementos como nombres, ceremonias, progresiones, uniformidad y su uso, ambientación, etc. Los marcos simbólicos de las secciones compuestas íntegramente por educandos de educación primaria, castores y lobatos, son desarrollados en el siguiente punto.

Otros elementos:

Además de los elementos descritos anteriormente, existen otros elementos, los cuales son:

El lema: El lema de los scouts en su versión inglesa es “Be Prepared “, el cual es traducido al castellano como “Siempre Listo” (Baden-Powell, 2008, p. 21).

El propósito diario, el cual es realizar una buena acción diaria, el cual tiene como propósito que la predisposición para ayudar al prójimo sin esperar recompensa se convierta en un hábito.

Los principios scouts, los cuales son tres y se basan en los ideales que deben orientar la vida de un scout que son Dios, patria y hogar (Organizción Mundial del Movimiento Scout, 2017, p. 2), los cuales están redactados de la siguiente manera, según el manual del educador de scout (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p. 37):

“- El Scout está orgulloso de su creencia y la pone en práctica.

– El Scout es solidario con su comunidad.

– El deber del Scout comienza en casa.”

Las virtudes scouts, según el mismo manual del educador scout (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p. 37) o cualidades que se asumen que deben tener los scouts, las cuales son: “lealtad, abnegación y pureza”.

Por último, el saludo scout, se realiza dando la mano izquierda y levantando la mano derecha aproximadamente a la altura del hombro, la cual muestra la palma vuelta hacia el frente y el pulgar sobre el meñique, mientras se mantienen los otros tres dedos estirados. Estos tres dedos representan las tres hojas de la flor de lis, emblema scout, que representa a su vez las tres partes de la promesa, los tres principios y las tres virtudes. Además, en la flor de lis scout, las hojas izquierda y derecha incluyen dos estrellas de cinco puntas, que representan los diez artículos de la ley. Por último, el pulgar sobre el meñique representa que “el fuerte protege al débil”, simbología que se mantiene en el saludo de las dos unidades pequeñas, castores y lobatos (Baden-Powell, 2008, p. 23).


Sección Castores:

La metodología scout está adaptada a los niños de seis a ocho años, correspondiente a los cursos primero y segundo de Educación Primaria, mediante el castorcismo, desarrollado en la sección Castores. Esta sección es la encargada de sentar las bases para la entrada de los jóvenes al escultismo mediante una concreción del Método Scout, empleando un marco simbólico fantástico ambientado en los relatos de “Los Amigos del Bosque”, “La vida en Estanque” o “Los pequeños hermanos que hablan”, cuyos protagonistas son aminales que hablan y personas, aprovechando el pensamiento animalista infantil para jugar a ser ellos e identificándose con los personajes de las historias, así como la inquietud natural por todo lo nuevo y aquello que les rodea. Este marco simbólico ayuda a mantener su motivación en el escultismo partiendo de sus intereses (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009;  Movimiento Scout Católico, 2013).

La sección, generalmente compuesta por un grupo pequeño de miembros, donde todas las actividades se realizan en grupo sin divisiones como en otras unidades, con el fin de  trabajar la participación e igualdad de todos sus miembros, basa toda su actividad en el juego y actividades continuas, como talleres, dramatizaciones o cuentos, adaptados al nivel de desarrollo de los castores, como vía para transmitir los objetivos y valores, principalmente la importancia de compartir y ayudar los demás, de forma concreta para que sean fácilmente entendibles, así como lograr desarrollar la autonomía personal de los educandos. Estos son denominados castores, cuyo conjunto se llama colonia, con un apoyo por parte de los monitores completo, con el nombre de Grandes Castores, que emplean nombres de los personajes de los relatos indicados anteriormente y cumplen un rol. Así, Malak, que en la historia es el búho sabio que ayuda a los castores a aprender, asume el papel de coordinador de la sección, o Burbujas y Pelirrojo, que en la historia son dos niños amigos de los castores, enseñan a los castores el mundo que les rodea jugando con ellos, según el sistema empleado por ASDE en su Programa Educativo Scouts de España -ASDE (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2018) y en el manual del educador de castores (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

La técnica de proyectos mencionada anteriormente se adapta a la sección denominándose “La construcción del dique”, la cual sigue los mismos pasos para el desarrollo de proyectos donde los monitores tienen una alta implicación debido a la edad de los educandos, pero procurando en todo momento que el papel de protagonismo recaiga sobre ellos para hacerles sentir protagonistas del proyecto propuesto. Estos proyectos, junto a los juegos y actividades descritos anteriormente, constituyen la metodología de educación por la acción del Método Scout. (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p.61)

La sección cuenta con los mismos elementos indicados en el Método Scout, además de los mencionados anteriormente, adaptados a este marco simbólico, simplificados y de facil entendimiento para la edad a la que están dirigidos. Estos elementos son:

El lema de la sección castores, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 84), es “Compartir”, tiene como propósito promover la generosidad y el compañerismo con el prójimo en una edad donde el egoísmo destaca en la forma de comportamiento de los niños. Este lema se incluye en la promesa y la ley de la sección para darle mayor importancia y facilitar que sea asimilado por parte de los castores (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

La promesa de castores, primera en realizar en la vida scout al entrar desde el inicio en un grupo, siendo esta “Yo (nombre del castor) prometo compartir mi labor como castor/a y participar con alegría en la Colonia”, (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p.41) donde se incluye el lema de compartir, concretándose en la participación durante las actividades de la colonia junto al resto de los castores y tratarse de un compromiso voluntario, realizándose mediante una actitud positiva representada mediante la alegría. Esta es realizada dentro de la formación de la sección dándole mayor importancia debido al compromiso personal que representa.

Una vez realizada la promesa los castores realizarán el saludo del castor, el cual se realiza con la mano derecha doblando el dedo índice y medio de la mano, mientras el dedo pulgar sujeta el dedo meñique y anular, simulando así las paletas del castor, y representando las dos partes de la ley por parte de los dos primeros dedos, mientras el pulgar representa que “el fuerte protege al débil”, siendo esta parte común al resto de saludos scouts.

La ley de castores o ley de la colonia, “El castor comparte con alegría y juega con todos” (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p.43), la cual se centra en el lema de la unidad, compartir, y en la participación en las actividades con todos sus compañeros de forma generosa y alegre, asumiendo las reglas de los juegos mediante una actitud positiva.

Esta ley carece de artículos para simplificar su mensaje y hacerlo directo, pasando los elementos de los artículos que componen la ley scout a quedar aparte, denominándose “Los consejos de Malak”, los cuales transmiten los mismos valores que los artículos de manera sencilla y concreta empleando el maro simbólico de la unidad, siendo cinco y correspondiéndose a los cinco dedos de la mano para emplearla como regla nemotécnica.

Los consejos de Malak, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 85), son:

  1. Cada cosa tiene su lugar.
  2. Limpio y sano debes crecer.
  3. Escuchando se aprende.
  4. Vivimos en el bosque, cuídalo.
  5. Todos y todas necesitamos tu ayuda.”

En cuanto a la progresión personal, los nombres de las diferentes etapas, adaptados a la simbología de la unidad, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 86), son: castor sin paletas, correspondiente a la etapa de integración que representa a un castor que acaba de nacer dentro de la colonia y debe aprender cómo funciona la vida en ella; castor con paletas, correspondiente a la etapa de participación que representa a un castor que ya a crecido, conoce la vida en la colina y es capaz de participar activamente en ella y castor Keeo, correspondiente a la etapa de animación que representa a uno de los personajes principales de la historia de la ambientación, el castor plateado Keeo, el cual es el ejemplo a seguir por el resto de castores de la colonia. Esta progresión se realiza en función de los indicadores de evaluación que fija el proyecto educativo de grupo, basado en el programa educativo de la asociación o federación sco            ut a la cual pertenezca dicho grupo (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).


Sección lobatos:

La metodología scout está adaptada a los niños de ocho a once años, correspondiente a los cursos de tercer, cuarto y quinto de Educación Primaria, mediante el lobatismo, desarrollado en la sección Lobatos. Esta sección adopta como marco simbólico la historia del libro de Rudyard Kipling “El libro de las Tierras Vírgenes”, escogido por Baden-Powell cuando se fundó la unidad, donde se emplea un mundo de fantasía y aventuras en la selva cuyo protagonista es Mowgli, quien convive con animales que adoptan cualidades humanas y hablando con el protagonista, ofreciendo soluciones y ayuda, transmitiendo una serie de valores y sentimientos en función de cada uno de los personajes de la historia (Baden-Powell, Manual de lobatos, 2008). Esta sección crece en número de miembros al incluir tres cursos en lugar de dos, como lo hacía lobatos, e introduce los pequeños grupos de trabajo donde aprenderán a conocerse en mayor profundidad y realizar una convivencia más cercana, denominadas seisenas, teniendo estos una función organizativa y no estructural, por lo que pueden variar y se usan en menor medida que en la siguiente unidad, la sección scout, al tener la unidad lobatos el propósito de crear la idea de “Familia Feliz” de la vida en manada. Los educandos de esta sección son denominados lobatos, y al conjunto de estos, manada, dividida como se ha mencionado anteriormente en seisenas de unos seis miembros cada una. Los monitores son denominados Viejos Lobos, los cuales, al igual que en castores, emplean nombres de personajes de la historia en función del rol que representa y asumen un nivel alto de apoyo para los lobatos. Así, el coordinador de la unidad suele emplear el nombre de Akela, lobo líder de la manada; Baloo representa al monitor con experiencia del funcionamiento de la unidad o Bagheera, quien anima las actividades constantemente (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

Las actividades más comunes de esta sección siguen siendo los juegos, los cuales aumentan en complejidad adaptándose a la edad de los lobatos. Al igual que los juegos, los talleres, dramatizaciones o cuentos forman parte de las actividades frecuentes de la unidad, que también aumentan en nivel de complejidad siguiendo el desarrollo físico e intelectual de los lobatos. Dentro de estas actividades, las veladas nocturnas donde los lobatos realizan representaciones, denominada “Flor roja”, supone un medio de expresión libre donde se desarrolla distintas formas de expresión, como la oral o la musical, favoreciendo el desarrollo de distintas áreas como la creatividad, el desarrollo de trabajo en equipo o la autoestima del lobato (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

En lobatos la técnica de proyectos toma el nombre de “Cacería” o “Gran Caza”, la cual se compone los mismos pasos que el resto de sistemas de proyectos, aumentando el nivel de responsabilidad de los lobatos en su preparación pero manteniendo un apoyo muy alto de los monitores, los cuales deben asegurar que el proyecto elegido sea el propuesto por los propios lobatos y pueda ser realizado, sin dejar de ser estos el centro del protagonismo de la actividad o actividades que formen la cacería Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

Los elementos del Método Scout toman sus nombres en base al marco simbólico de la unidad mencionado anteriormente, “El libro de las tierras Vírgenes”, adaptándolos de la siguiente forma, según el Manual del educador de lobatos (Federación de Scouts – Exploradores de España (ASDE), 2009):

El lema de la sección, “Haremos lo mejor” (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009, p.46), que enseña a mejorar de forma constante y progresiva al lobato, esforzándose por mejorar cada día e introduciendo el propósito diario scout de la Buena Acción diaria. Además, refleja el espíritu de unión de la sección para trabajar juntos ayudándose mutuamente a lograr sus objetivos.

La promesa de lobatos, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 84), es:

“Yo prometo hacer siempre lo mejor, ser amigo de todas las personas, ser fiel a mis creencias (o cumplir mis deberes para con Dios y la patria, según el grupo), cumplir la ley de la manada y hacer cada día una buena acción”

La realización de la promesa es solicitada por parte del lobato dentro del Consejo de Roca, reunión de la manada donde se tratan temas de importancia, como la progresión, evaluación de la convivencia o funcionamiento de la manada. En esta reunión se realiza por parte de los lobatos la opinión y evaluación sobre esta, siendo el propio lobato quien tome la última decisión de realizarla al tratarse de un compromiso personal. Esta promesa se divide en varias partes, iniciándose con el lema de la sección, prometiendo hacer siempre lo mejor y continúa especificando ser amigo del resto de personas, cumplir con sus creencias o deberes, comprometiéndose a obedecer la ley de la manada y por último, realizando el compromiso de realizar cada día una buena acción, al igual que se realiza en la promesa scout. Esta promesa se representa mediante el saludo del lobato, el cual se realiza extendiendo los dedos índice y medio en forma de V mientras el meñique y anular permanecen doblados sujetados por el pulgar. La V representa las orejas del lobato, mientas los otros dedos, al igual que en el resto de saludos scouts, representa que el fuerte protege al débil (Federación de Scouts – Exploradores de España ASDE, 2009).

 

La ley de los lobatos, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 84), es “El lobato escucha y obedece al Viejo Lobo y no sólo se escucha a sí mismo”, transmitiendo la importancia de mantener una actitud de escucha hacia los monitores, los cuales le enseñan los valores imitar a través de las actividades y juegos, dejando la individualidad para participar con sus compañeros compartiendo sus experiencias y aprendiendo a convivir con ellos.

Esta ley se complementa por medio de las máximas de Baloo, que representan los valores a transmitir en la sección de forma concreta para los lobatos. Estas máximas son seis, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 85), las cuales son:

  1. El lobato piensa primero en los demás.
  2. El lobato tiene sus ojos y sus oídos bien abiertos.
  3. El lobato es limpio y ordenado.
  4. El lobato siempre está alegre.
  5. El lobato dice la verdad aunque le cueste.
  6. El lobato respeta las cosas y cuida la Naturaleza.

La progresión personal en la sección, según el Programa Educativo Scouts de España -ASDE, (2018, p. 86), toma el nombre de “huellas”, en referencia a la senda a seguir de los lobos de la manada. Estas huellas son la huella de Akela, correspondiente a la etapa de integración, que representa la llegada a la manada como un nuevo lobato, la huella de Baloo y Bagheera.

Lorenzo Montero

Bibliografía y referencias: