img_2892Todo empezó con las despedidas, los besos y los abrazos. Nos subimos al autobús y como siempre nos distrajimos cantando. No sé muy bien qué pasó este año, pero mucha gente se mareó y vomitó durante el viaje. Nada más llegar a Huerta de Arriba comimos, y después comenzamos a subir las tiendas a la zona de manada para montarlas.

Esa misma noche, los jefes nos contaron que el campamento iba sobre la vuelta al mundo, pero no en 80 días, sino en 15 días y que teníamos que tener mucho cuidado con el malvado Sullivan, porque nos iba a poner muchas trampas.

Los siguientes días, hasta que nos fuimos de marcha, se nos pasaron volando. Hicimos juegos, manualidades y mucho más…Y por supuesto no podemos olvidarnos de las construcciones. Cada seisena preparó su macutero, su trípode, su zapatero, etc.

Al fin llegó el primer día de marcha. Muchos estábamos entusiasmados aunque no faltaba img_3120a quienes les daba un poco de vaguería tener que andar tanto. Los paisajes eran preciosos y los disfrutamos mucho. La primera noche coincidimos con los castores y la segunda nos los pasamos genial cantando el cumpleaños feliz a Bogdan. Hicimos la marcha muy bien aunque nos cansamos un poco.

Después de la marcha llegó el día de padres. Fue un día muy especial para nosotros, nos lo pasamos genial y nos hizo mucha ilusión enseñarles todo el campamento, sobre todo las torres de escultas y de clan y el tren de manada.

El resto del campamento terminamos de dar la vuelta al mundo y logramos encontrar a Willy Fog, que había sido secuestrado por Sullivan. Para encontrarle tuvimos que colgar carteles y buscar pistas. Lo más divertido fue el día de las pruebas porque algunos tuvimos que hacer cosas muy graciosas como vestirnos con un montón de capas de ropa, comer atados a otra persona, ir descalzos a formación, etc.

También nos gustó mucho el día de la velada de canciones. Cada unidad preparó varias canciones. Algunas eran muy chistosas y otras muy bonitas. Las que más nos gustaron fueron las de los jefes y la de seisena azul porque eran muy divertidas.

img_4489Sin darnos cuenta el campamento llegó a su fin. A todos nos dio mucha pena, pero sabíamos que nos llevábamos con nosotros una gran experiencia y otro recuerdo genial.

Chikai (María) y Guillermo A. (lobatos)